jueves, 27 de noviembre de 2008

El Perdón

Esa noche me acosté temprano. La seguridad de pasearme eternamente por el infierno me causaba emoción. Mentí, manipule, engañe e hice todo el daño posible, sin sentir por ello remordimiento alguno para conseguir mi objetivo.

Había cortado en forma certera mis miedos. Un cálido torrente color púrpura emanaba por las muñecas de mis manos. El sueño me vencía cuando sentí que mi pecho se templó para darle paso a un aliento gélido. Mis ojos débiles lentamente se cerraron.

Cuando desperté. Unas figuras etéreas me conducían a una gran puerta. De ella sobresalía un enorme letrero con la leyenda “Bienvenido al paraíso”. Los mire lastimosamente. Con una sonrisa que poco a poco se fue convirtiendo en una mueca de ironía, me respondieron: “Dios te ha perdonado”.

1 comentario:

genetticca dijo...

La vida es un milagro(Kusturica)
El perdon una falacia,puesto que no
existen ni el bien ni el mal,todo es relativo.Cortar los miedos sin emfrentarse a ellos es una manera facil de obtener un pasaporte hacía los paraisos perdídos.
dios ni juzga ni perdona,se limita a tener paciencia..y amarnos:como los padres con los hijos.
Saludos